El Banco de Inglaterra subió este jueves los tipos de interés en medio punto, del 4,5% al 5%, el nivel más alto desde 2008.
Lo anterior, a fin de controlar la inflación interanual en el Reino Unido, que el pasado mayo se situó en el 8,7%.
La entidad anunció su decimotercera subida consecutiva de los tipos al finalizar una reunión de su comité de política monetaria.
El banco emisor optó por recurrir a esta medida tras conocerse ayer los decepcionantes datos -peores de los anticipados por los analistas- de la inflación interanual en este país.
Es una cifra que continuó en mayo en el 8,7%, igual que en abril, pero aún en niveles “históricamente altos”, según la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS).
Tras conocerse los datos, el ministro británico de Economía, Jeremy Hunt, indicó que el Gobierno tiene una “determinación indiscutible” para bajar la inflación.
Esto, “ya que es la única manera en el largo plazo de aliviar la presión a las familias con hipotecas”. “Si no adoptamos ahora medidas, más tarde será peor”, avisó el político.
Hunt remarcó que “la inflación alta es una fuerza desestabilizadora que se come las nóminas y ralentiza el crecimiento”.
“La inflación subyacente -que no depende de elementos volátiles como la energía o los alimentos- es más elevada en 14 países comunitarios y los tipos de interés están subiendo por todo el mundo, pero la lección de los otros países es que si te mantienes firme, rebajas la inflación”, señaló.
Por su parte, un portavoz de Downing Street –sede del Gobierno- indicó hoy que el gobernador de la entidad bancaria independiente, Andrew Bailey, “sigue contando con el apoyo del primer ministro”, Rishi Sunak.
“El primer ministro cree que es importante continuar respaldando al banco en el trabajo que están realizando”, señaló la fuente.